Los objetivos de la
alimentación del niño en edad preescolar y escolar son
asegurar un crecimiento y desarrollo adecuados, teniendo en cuenta su actividad
física y promover hábitos alimentarios saludables para prevenir enfermedades
nutricionales a corto y largo plazo.
La etapa preescolar es desde 1 a 6 años. Desde el nacimiento hasta
alrededor del primer año la estatura del niño aumenta cerca del 50%. Es en ese
momento, cuando requerirá de 5 años para incrementar su estatura otro 50%
semejante: al año, el niño triplica el peso que tenía al nacimiento; sin
embargo, necesita toda la etapa preescolar para duplicar de nuevo su peso.
La etapa escolar es desde
los 6 años hasta los 10 u 11 años. Se le ha denominado
periodo de crecimiento latente porque durante ella son muy estables las tasas
de crecimiento somático y los cambios corporales se efectúan de una manera
gradual.
En niñas la velocidad máxima de crecimiento es a los
11 años y ocurre un brote de crecimiento entre los 6 y 9 años que se debe a un
aumento de grasa. El área muscular experimenta un incremento menor entre los 9
y medio y los 12 años, que después decrece.
En niños la velocidad máxima
de crecimiento es a los 13 años y el brote se da entre los 7 y los 12 años. A
los 12 años, cuando ocurre un segundo brote incrementándose el área muscular
acompañado de un balance negativo de grasa.
Conducta
alimentaria.
La conducta alimentaria de
cada niño se deriva de sus propias características físicas, sociales y psicológicas.
Es el responsable del niño quien decide que va a comer, como, cuando y donde lo
hará, hacia esa persona se debe dirigir la orientación para que desempeñe de
mejor manera la tarea que ya realiza, brindando una buena nutrición para él niño, generando de una relación
alimentaria positiva.
La relación alimentaria es
un proceso interactivo en el que participan la madre –o quien la sustituya- y
el niño, y se conforma con todas aquellas interacciones que suceden en torno a
la alimentación: selección, compra, ingestión, actitudes y comportamientos.
Una relación alimentaria
sana:
- Apoya el desarrollo del niño
- Contribuye a formar actitudes positivas con respecto a su persona y al mundo que lo rodea
- Ayuda a que consuma una dieta correcta
- A regular en forma conveniente la cantidad de alimentos que ingiere
- Alberga un gran potencial para prevenir y tratar problemas nutricios
Los encargados (padres,
equipo de salud, maestros) son responsables de que alimentos ofrecen a los
niños y como los ofrecen y los niños son responsables de cuanto comen.
Conducta alimentaria del
preescolar.
Para el niño de 1 a 3 años
una relación alimentaria adecuada es aquella que ofrece libertad y apoyo para
favorecer su autonomía y marca límites claros que le den seguridad.
Los encargados son
responsables de seleccionar y comprar alimentos, preparar y ofrecer las
comidas, regular el horario de comidas, ofrecer los alimentos para que el niño
pueda manejarlos, hacer agradables las horas de
comida, propiciar que el niño esté atento en su alimentación, establecer
reglas de comportamiento en la mesa y determinar el lugar donde se come. Pero los encargados no son responsables de
decidir que cantidad come el niño, decidir si el niño come o no y como se
transforma el cuerpo del niño.
Horarios
y comidas en familia.
El niño de 1 año debe
integrarse a la comida familiar. Las comidas pequeñas y frecuentes se adaptan
mejor a sus necesidades y un horario de comidas permite al niño regular su
ingestión.
Las comidas familiares
desempeñan un papel decisivo en la transición de hábitos y costumbres, se debe
procurar que todos los miembros de la familia se reúnan para comer por lo menos
una vez por semana o en alguna de las comidas del día.
Técnicas
de alimentación.
El niño de 1 a 6 años centra
su interés en socializar más que en alimentarse. Es necesario preparar al
pequeño dándole un tiempo de transición para sosegarse y descansar. Se le debe
presentar una variedad de alimentos que pueda ver, tocar, oler, oír y saborear
(en especial cuando son nuevos para el).
La masticación merece atención
especial, ya que es el primer paso para una buena degustación, digestión y
aprovechamiento de los alimentos. Conforme brotan los dientes se debe aumentar
la consistencia de los alimentos y se debe respetar su particular ritmo para
comer.
Introducción
de nuevos alimentos.
La neofobia (rechazo hacia
los alimentos o platillos nuevos o en preparaciones novedosas) se puede
modificar, se ha demostrado que con la exposición repetida, muchos de los
alimentos serán aceptados por el niño
Existen una serie de estrategias
para promover la aceptación de nuevos alimentos que consisten en facilitar que el niño tenga varias
oportunidades de probar los amentos nuevos, observar en que momento del dia el
niño está más dispuesto a probar un alimento nuevo, ofrecerle el alimento
cuando tenga hambre, darle el alimento nuevo junto con los que ya conoce, servirle
una porción pequeña, considerar que no es suficiente que el niño mire y huela los
alimentos, dar por hecho que el niño va a probar el alimento y ofrecerle el
alimento, no forzarlo a que lo pruebe.
Preferencia,
selección y consumo de alimentos.
Estos patrones son únicos
para cada niño y dependen de varios factores, algunos innatos y otros
aprendidos como:
- La influencia de otros niños
- Familiaridad con los alimentos
- Dulzura del alimento
- Cultura
- La asociación sistemática de los alimentos ricos en lípidos con contextos sociales positivos (fiestas, premios, regalos, recreo, vacaciones) incrementa su preferencia.
Presentación de los alimentos y métodos
de alimentación.
- Ofrecer al niño pequeño la misma comida que consume toda la familia
- Destinar suficiente tiempo a la comida.
- Ayudar al niño a cortar trozos del tamaño de un bocado, cuando no es capaz de hacerlo por sí solo.
- Servir los alimentos a la temperatura ambiente
- Preparar alimentos que el niño pueda tomar con las manos.
- Variar las texturas de los alimentos.
- Combinar colores para hacer más atractiva la comida.
- Ser tolerante ante ciertos caprichos
- Preparar las sopas lo suficientemente espesas para usar cuchara o lo suficientemente liquidas para que se puedan beber.
- Dar una presentación sencilla a los alimentos.
- Dar a las verduras presentaciones atractivas para facilitar su aceptación.
- Sentar al niño en una silla alta en la que pueda apoyar los pies.
- Prevenir la asfixia por alimentos
Desarrollo
de habilidades del l niño de 1 a 3 años
HABILIDAD
|
ACTIVIDAD
|
Mejora
su capacidad para morder, masticar y tragar
|
Ofrecerle
una variedad de alimentos con diferentes texturas.
|
Inicia
y mejora el uso de la cuchara
|
Apoyarlo
en su uso
|
Mejora
su destreza para usar la taza
|
Darle
líquidos en taza y después en vaso. Evitar el biberón.
|
Explora
su alrededor, se lleva objetos a la boca
|
Ayudarlo
a distinguir entre lo que es alimento y lo que no.
|
Puede
restregar, rasgar, sumergir, trocear
|
Ofrecerle
oportunidades de preparar los alimentos; lavar verduras, desmenuzar pollo.
|
Desarrollo de habilidades
del niño de 3 a 6 años.
HABILIDAD
|
ACTIVIDAD
|
Mejora
su coordinación motriz fina
|
Permitirle
que se alimente solo, ayudarle
para servir los líquidos y cortar la carne.
|
Mejora
su coordinación motriz gruesa
|
Invitarlo
a poner o quitar la mesa o a lavar la vajilla
|
Imita
a los mayores, en especial a sus padres.
|
Ofrecerle
ejemplos positivos
|
Avanza
su desarrollo del lenguaje
|
Alentarlo
a expresar sus sensaciones acerca de los alimentos y la alimentación
|
Reconoce
los colores, las formas y las texturas
|
Invitarlo
a identificar los alimentos a través de sus colores, olores, formas y
texturas
|
Responde
mejor a las opciones que a las imposiciones
|
Ofrecerle
oportunidades de escoger
|
Conducta alimentaria del
escolar
En esta etapa sigue vigente
la regla básica de la división de responsabilidades, aunque es necesario hacer
ajustes a esta regla, pues en esta etapa el objetivo es lograr que el pequeño
asuma poco a poco la responsabilidad de su propia alimentación.
Cuando el niño llega a la
edad escolar es recomendable que tenga claro que hay un horario de comidas, sepa
que se debe presentar a las comidas, coma en uno o dos lugares designados para
ello y no en cualquier lugar de la casa, sea sociable y se comporte de manera
agradable, pueda manejar cada vez mejor los utensilios, acepte la mayoría de
los alimentos y decida el mismo cuanto comer.
Para
incrementar la participación del escolar en su alimentación se requiere fijar
límites, pedirle tareas que pueda realizar de acuerdo con su edad. Mientras más
activamente participe el escolar, mayor será su aprendizaje, al mismo tiempo
que se fomentara su creatividad.
Horarios
y comidas en familia
Las comidas en familia
siguen siendo muy importantes, las cuales en esta etapa se ajustan a las
actividades familiares y escolares. El apetito en esta etapa varía mucho, puede
cambiar de un día para otro o entre una comida y otra. En caso de que se
rechace algún alimento o platillo, siempre habrá una colación o comida posterior
para que se reponga.
Comidas rápidas
Comer
con los amigos es una forma de recreación y sociabilidad importante en esta
edad.
La
comida rápida tiene una disponibilidad permanente y decoración atractiva por
lo que es normal que el niño se siente
atraído por ese tipos de alimentos, pero
hay que tener cuidado con su consumo excesivo
porque pobres en vitaminas, minerales y fibra pero abundantes en sodio, azúcar
y grasas. Su costo es elevado con
respecto a su contenido de nutrientes.
Tomar desayuno
Es importante fomentar
el hábito de desayunar, alginas sugerencias para
fomentar en los niños la costumbre son:
- Estar convencidos del beneficio de desayunar para poder transmitirlo a los niños.
- Programar el desayuno con anticipación
- Reservar el tiempo suficiente para la preparación y consumo del desayuno
- Procurar que el desayuno sea variado
- Dejar la mesa puesta desde la noche anterior
- Hacer desayunos sencillos
- Adelantar alguna parte de la preparación desde la víspera
- Utilizar “sobras” de dias anteriores y combinarlas con otros alimentos.
- Acostar más temprano al niño.
- Despertar al niño un poco antes, para que le dé tiempo de comer sin prisa.
- Desayunar sentados.
- Procurar que el niño desayune con la familia o por lo menos acompañado mientras desayuna.
Requerimientos nutricionales
Proteínas
Las proteínas son
importantes porque contribuyen al crecimiento del niño, ayudando en el
crecimiento celular y su supervivencia. Las proteínas no pueden ser
sintetizadas en su totalidad por el organismo humano, por lo que deben de ser
aportadas en un 20% por la dieta.
Nivel seguro de ingesta de
proteínas
Grupo
de edad
|
Proteínas
(g/kg/día)
|
0-3
meses
|
2.3
|
3-6
meses
|
1.9
|
6-9
meses
|
1.7
|
9-12 meses
|
1.5
|
1
a 3 años
|
1.2
|
4
a 6 años
|
1.1
|
7
a 10 años
|
1
|
11
a 14 años
|
1
|
Carbohidratos
Son fuentes importantes de
energía. Deben ser 60% de la dieta. Las frutas y azucares son simples, y los cereales,
tubérculos, leguminosas, verduras son complejos.
Grasas
Las grasas y el colesterol
se recomienda que formen parte únicamente del 30% del total de la dieta del
niño mayor de 2 años. De esta el 10% de c/u
(saturada, monoinsaturada y poliinsaturadas).
Calorías
Grupo
de edad
|
Recomendación
de aporte (kcal/kg/día)
|
|
1
a 3 años
|
102
|
|
4
a 6 años
|
90
|
|
7
a 10 años
|
70
|
|
Mujeres
|
Hombres
|
|
11
a 14 años
|
47
|
55
|
Vitaminas y minerales
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